Calvin & Hobbes, Bill Watterson (1990) |
A mi heterónimo, que debe asistir por obligación a una de esas comisiones académicas para iniciados en los ritos y mi(ni)sterios educativos, hace poco un colega le reprochó estar instalado en la "cultura de la queja". Lo había motivado su crítica a una de esas interpretaciones crípticas que caracterizan los criterios aplicados en la resolución de una convocatoria pública de evaluación de la calidad de las publicaciones científicas.