Agnus Dei, Francisco de Zurbarán (1635-1640) |
Como si fuera un náufrago de lecturas recientes, Cavalcanti se
precipita a abrir Palomas y serpientes (Granada, 2015), el último libro de Enrique García-Máiquez
(1969). Y, goloso, no ansioso, empieza a leer sin descanso sus aforismos. ¿Cómo
resistirse a la cándida sagacidad de su escritura, fragmentaria e inquietamente
serena, en una edición además rugosa al tacto, espléndida en su sencillez?